En Panamá existe una deliciosa bebida típica cuyos orígenes se vinculan a las poblaciones afroantillanas e indígenas nativas, y que pese a ser bien conocida por quienes somos locales, no lo es tanto en el resto del mundo. Y menos aún conocen su ingrediente principal: algas marinas.
Esta refrescante preparación se conoce con el nombre de icing glass, que también admite las variaciones de isinglass e icinglass, y que podría traducirse desde el idioma inglés como “cristal helado” o “helado cristalino”. En esta ocasión queremos contarte más acerca de esta bebida, especialmente acerca de las algas marinas que utilizan para prepararla.
Conociendo la historia del icing glass
Desde que existen registros históricos (y seguramente con mucha anterioridad a esas crónicas) los pobladores originarios de las regiones costeras del mar Caribe recolectaban algas marinas de las que se usan para la fabricación del icing glass tal y como lo conocemos en la actualidad, aunque lo hacían para utilizarlas en muchas otras preparaciones y con diversos objetivos que iban desde la alimentación hasta la elaboración de medicinas.
Tales algas marinas son conocidas con varios nombres, y denominadas principalmente en inglés. Se las llama “seamoss” (“musgo marino”) y también “irish moss” (“musgo irlandés”), pero también se las denomina por extensión como “isinglass”, por su relación imprescindible como ingrediente para la bebida icing glass. Su uso para también se vincula a otras preparaciones con productos lácteos, como lo son las cremas heladas y los yogures.
En la región de Panamá y Colombia se destaca la utilización que hacen de estas algas los indios Gunas, que colectan el irish moss para hacer bebidas vitamínicas de propiedades energizantes y medicinas para muy variadas dolencias, desde dolores dentales hasta afecciones de la piel.
Pero en cuanto a la elaboración del icing glass como tal, su origen se remonta a los colonos irlandeses que se ubicaron en la isla de Jamaica, que es actualmente uno de los mayores productores y consumidores de icing glass. Desde allí fue llevada a Panamá por los trabajadores afrodescendientes que trabajaron en la construcción del Canal Interoceánico y el ferrocarril.
El icing glass que se consume tradicionalmente lleva varios ingredientes: clavo de olor, gelatina o espesante (que también se obtiene de las algas marinas), canela, agua, leche evaporada y, por supuesto, el alga irish moss. Es sumamente refrescante y de altísimo valor nutricional.
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Algunos datos sobre el alga irish moss
La macroalga marina irish moss lleva el nombre científico de Chondrus crispus, y es un alga roja del filo Rhodophyta. Está presente en aguas marítimas del hemisferio norte del planeta, con predominancia en las regiones del Atlántico americano y europeo.
Sus componentes predominantes son los carragenanos y los mucílagos, ambos de gran valor para la industria alimenticia, cosmética y medicinal. Sus usos en estos sectores aprovechan sus propiedades emulsionantes y espesantes, pero también (y según los procesos que se le apliquen) pueden valer como laxantes, emolientes y antiinflamatorios.
Además de ser muy ricos en vitaminas y minerales poseen propiedades medicinales intrínsecas que las hacen especialmente valiosas para tratar dolencias gastrointestinales, asma, gripes y resfríos, úlceras y dolores articulares. Es también muy importante su uso en tratamientos para pacientes diabéticos, siendo una de las áreas médicas donde más se investiga y aplica actualmente el alga irish moss.
Llegamos así al final de un nuevo artículo para ayudarte a conocer más acerca del atrapante mundo de las algas marinas, sus aplicaciones para los distintos consumos posibles y más datos sobre su influencia cultural en las poblaciones humanas. Esperamos que lo hayas disfrutado, ¡y que puedas beber un delicioso icing glass muy pronto!