El peor enemigo de las algas rojas: el hongo akagusare

De la misma manera en que los agricultores de cultivos terrestres deben luchar contra distintos tipos de plagas que azotan a sus plantas, los acuicultores que se dedican a la producción de algas también tienen sus enemigos naturales que afectan a sus cultivos.

En el caso de las algas rojas existe un hongo en particular al que se le ha dado en conocer por el nombre con el que lo bautizaron en el Japón, “akagusare”, y que ataca a estos cultivos de forma voraz. Conozcamos un poco más al peor enemigo de las algas rojas.

Akagusare: el hongo que mata a las algas rojas

Comencemos por la etimología del nombre de este hongo, que de por sí nos resultará muy gráfica. Literalmente, en idioma japonés el término “akagusare” significa “podredumbre roja”, dadas las consecuencias que genera en los cultivos de algas. Dado que los japoneses se dedican a esta actividad desde tiempos inmemoriales, el nombre se popularizó al extenderse esta práctica a otros países del mundo.

De todas maneras, para ser más acertados, debemos referirnos al nombre científico que este hongo posee: Pythium porphyrae. Analizando este término, se describe el enrojecimiento (porphyrae) que causan los organismos pythium, un género parasitario que posee cientos de especies que afectan también a las raíces y tallos de vegetales terrestres.

Pythium porphyrae y sus víctimas predilectas

Esta especie en concreto, Pythium porphyrae, el hongo akagusare, se dedica parasitar y pudrir los tallos de las algas marinas, con especial predilección por las algas rojas, aunque no de forma exclusiva.

Este hongo ha sido encontrado en al menos 22 especies de algas marinas. En 2017 se descubrió que la especie Pythium posee un amplio árbol filogenético, es decir, su familia es muy extensa. En análisis genéticos detallados se concluyó que muchas variedades que eran consideradas Pythium porphyrae en realidad pertenecían a otras especies, menos nocivas o extendidas geográficamente.

Características, distribución e impacto del Pythium porphyrae

Como ya hemos mencionado, los registros más antiguos (y también los más abundantes) de las podredumbres de los tallos en los cultivos de algas rojas causadas por el Pythium porphyrae provienen del Japón. Luego de este país, los cultivos que más han presentado y registrado esta problemática se ubican en Hong Kong, Nueva Zelanda y Países Bajos, principalmente en cultivos a mar abierto, donde las condiciones ambientales son mucho más difíciles de controlar.

El hongo akagusare encuentra sus condiciones ideales de desarrollo en aguas de baja salinidad, con temperaturas que promedien entre los 24 y 28 grados centígrados (temperatura bastante alta si consideramos que la temperatura promedio de los océanos es de unos 17 grados centígrados). De todas formas, a partir de los 15 grados centígrados el Pythium porphyrae puede atacar a los cultivos, especialmente si estos se hallan en etapa de reproducción.

Prevención y soluciones contra el hongo akagusare

Teniendo en consideración las mencionadas condiciones ideales para la aparición y proliferación del akagusare en los cultivos de algas rojas, una primera forma de prevenirlo es justamente controlando la salinidad y la temperatura del agua, y si está en las posibilidades del acuicultor, mantenerla en niveles donde el hongo no prospere. Parece obvio, pero es el primer paso a realizar.

En caso de confirmarse la presencia de Pythium porphyrae en los cultivos de algas rojas, lo principal es eliminar a las algas contaminadas para evitar que la plaga se extienda a aquellas algas que aún están sanas. Una vez realizado esto, puede procederse a exponer al aire las raíces de las algas sanas durante unas tres o cuatro horas diarias, lo que ha demostrado ser un método efectivo para eliminar al hongo en sus etapas preliminares. 

Finalizamos así nuestro informe acerca del hongo Pythium porphyrae, más popularmente conocido por su nombre japonés de akagusare, un implacable enemigo de las algas rojas al que afortunadamente puede combatirse en los cultivos controlados y bien atendidos.